Cuando hace unos días publiqué en redes sociales y aquí las fotos de mi nueva melena color rosa melocotón fantástico, el grito fue unánime... y no de admiración hacia mi cabellera, ¡sino hacia la barra de labios que le acompañaba!
Y claro, pensé que un labial que eclipsaba incluso un cambio de color capilar cuasi de fantasía... debía ser el labial con mayúsculas. Y sí, lo es.
Se trata del Erin de la colección de maquillaje que ha creado Gigi Hadid (en colaboración, supongo, con Erin Parsson, la maquilladora global de Maybelline NY) para esa firma de supermercado, gama media, tan conocida por sus magníficas barras de labios Sensational Lipstick.
La compra de este labial posee, además, una pequeña historia (o hintrahistoria) en mi vida que paso a relararos, modo blog personal on.
Estábamos Rebeca y yo viendo auténticas preciosidades en Sephora (la colección navideña de Nars, que pronto os mostraré), y yo mentalmente iba redactando mi lista de deseos, porque en ese momento lo que es comprar no podía comprar nada -Noviembre es un mes difícil-, cuando de repente Rebe me dijo: vamos a Douglas que quiero enseñarte un labial de Maybelline que te va a entusiasmar.
Y era este: perteneciente a la colección East Coast Glam de Gigi Hadid para Maybelline, que posee máscaras de pestañas, delineadores, iluminadores y hasta paletas aunque a España sólo han llegado íntegros los sublimes "pintalabios".
Unos labiales mates que tienen la particularidad de ser ultra hidratantes y muy cremosos pero nada grasientos ni húmedos, y de declinarse en tonos llenos de glamour como Taura, un clásico color desnudo y se dice que el favorito de Gigi, o Khair, un rojo también clásico que alegra cualquier rostro y que se llama así en honor al segundo nombre de Bella Hadid.
Pero lo que de veras me encandiló de esta edición limitada, después de la decepción con Balmain X L´Oreal, fue el precio de las mencionadas barras: siete euros con noventa y nueve céntimos. En estas condiciones se puede una atrever al juego de "ensayo error"...
Solo que, en esta ocasión, el ensayo ha terminado en un clamoroso acierto y en una historia de amor cosmético que no parece tener fin: el labial Erin está hecho para mis labios y, sobre todo, para mi nuevo color de pelo.
Mate sin excesos, cremoso sin derretirse en el labio. Duradero sin dañar la piel de la boca. De ligero olor y sabor dulce pero sin empachar. El tono de nuevo me lo vendieron como un reflejo del Embellishment de Nyx y de nuevo no, no lo es, pero esta vez ¡es mucho mejor! Un "nude" color labio subido, tirando a ciruela o frambuesa, mate y lleno de elegancia:
No voy a decir que hidrate el labio pero lo mima, no lo destroza, quizás, entre otros motivos, porque no se hace necesario aplicar a cada cinco minutos: se trata de un lápiz muy duradero. Visto el éxito obtenido y, algo mucho más importante, lo que me disloca a mí..., creo que va a convertirse en mi labial barato de cabecera, ¡si es que no ha alcanzado eses discutido podio ya!
![]() |
Luz solar directa, recién aplicado, #nofilter |
Y claro, pensé que un labial que eclipsaba incluso un cambio de color capilar cuasi de fantasía... debía ser el labial con mayúsculas. Y sí, lo es.
Se trata del Erin de la colección de maquillaje que ha creado Gigi Hadid (en colaboración, supongo, con Erin Parsson, la maquilladora global de Maybelline NY) para esa firma de supermercado, gama media, tan conocida por sus magníficas barras de labios Sensational Lipstick.
![]() |
Mueble expositor en Douglas Gran Vía, Logroño |
La compra de este labial posee, además, una pequeña historia (o hintrahistoria) en mi vida que paso a relararos, modo blog personal on.
Estábamos Rebeca y yo viendo auténticas preciosidades en Sephora (la colección navideña de Nars, que pronto os mostraré), y yo mentalmente iba redactando mi lista de deseos, porque en ese momento lo que es comprar no podía comprar nada -Noviembre es un mes difícil-, cuando de repente Rebe me dijo: vamos a Douglas que quiero enseñarte un labial de Maybelline que te va a entusiasmar.
Y era este: perteneciente a la colección East Coast Glam de Gigi Hadid para Maybelline, que posee máscaras de pestañas, delineadores, iluminadores y hasta paletas aunque a España sólo han llegado íntegros los sublimes "pintalabios".
![]() |
Tono Khair |
Unos labiales mates que tienen la particularidad de ser ultra hidratantes y muy cremosos pero nada grasientos ni húmedos, y de declinarse en tonos llenos de glamour como Taura, un clásico color desnudo y se dice que el favorito de Gigi, o Khair, un rojo también clásico que alegra cualquier rostro y que se llama así en honor al segundo nombre de Bella Hadid.
Pero lo que de veras me encandiló de esta edición limitada, después de la decepción con Balmain X L´Oreal, fue el precio de las mencionadas barras: siete euros con noventa y nueve céntimos. En estas condiciones se puede una atrever al juego de "ensayo error"...
![]() |
Erin |
Solo que, en esta ocasión, el ensayo ha terminado en un clamoroso acierto y en una historia de amor cosmético que no parece tener fin: el labial Erin está hecho para mis labios y, sobre todo, para mi nuevo color de pelo.
Mate sin excesos, cremoso sin derretirse en el labio. Duradero sin dañar la piel de la boca. De ligero olor y sabor dulce pero sin empachar. El tono de nuevo me lo vendieron como un reflejo del Embellishment de Nyx y de nuevo no, no lo es, pero esta vez ¡es mucho mejor! Un "nude" color labio subido, tirando a ciruela o frambuesa, mate y lleno de elegancia:
![]() |
Junto a una ventana, tras dos horas de aplcación, #nofilter |
No voy a decir que hidrate el labio pero lo mima, no lo destroza, quizás, entre otros motivos, porque no se hace necesario aplicar a cada cinco minutos: se trata de un lápiz muy duradero. Visto el éxito obtenido y, algo mucho más importante, lo que me disloca a mí..., creo que va a convertirse en mi labial barato de cabecera, ¡si es que no ha alcanzado eses discutido podio ya!