A estas alturas y con estos calores infernales, casi no apetece ¡ni maquillarse! Por eso nos ayudan tanto las propuestas sugestivas que prometen un chapuzón visual y que no duelen en el bolsillo.
Haciendo mi compra habitual en Mercadona, decidí acercarme a la sección de perfumería por el famoso "mist" de rosas, del que pronto os hablaré, cuando mis ojos quedaron prendidos en esta paleta:
Creo que Deliplús ha saltado con esta nueva creación al nivel de ¡obra de arte!
A lo mejor me estoy emocionando, pero es que este estampado en cartón fue para mí como un oasis en medio del calor, me transportó a paisajes paradisíacos.
Pero es que abrimos la paleta, protegida por una manga de cartón de igual estampado, y nos encontramos con esta sinfonía de tonos marinos y azul piscina que yo anhelaba en el anterior post.
Leí en Instagram que Mercadona ha querido hacer un clon de Huda Beauty: yo no lo sé porque Huda no es una firma que me apetezca demasiado, pero el espectáculo tornasolado de algunas de sus sombras y de sus tonos turquesas más o menos profundos es arrebatador.
Para qué engañarnos, algunas sombras mates "pinchan".
Si lo que os llama la atención de la paleta es el verde lima número siete o el azulón contiguo, "abandonad toda esperanza".
En cambio la sombra número uno es "amor, amor, catástrofe". Un azul navy saturado, denso, pigmentadísimo. Miradlo en mi dedo meñique, ¡es el rey!
De todas formas, lo mejor de Amazonia está en sus shimmers, que algunos son verdaderas sombras dúocromas.
En el caso del número cinco, que veis en mi dedo corazón, estamos hablando de los famosos "topper" que tan de moda están.
Sorprende la calidad y la duración en el párpado de estas sombras, a mí me aguantan una jornada entera sin migrar.
Os ofrezco un maquillaje con mi sombra favorita: la número nueve, un azul de partículas aguamarinas absolutamente cautivador.
Y si aplicamos "a dedo" el número cinco encima, y marcamos las esquinas externas con el marino mate, delineando suavemente con él a ras de pestañas inferiores, nos queda este look:
Pero no pensáis que iba a quedarme con las ganas de probar el número tres, ese petróleo verdoso y tornasol, o de trabajar más a fondo este azul marino intenso...
Con la mezcla de estos dos colores sobre una base verde lima, hice este segundo look:
Tenía un claustro de mi universidad, online obviamente, y quería enfatizar la mirada a ras de pestañas superiores e inferiores.
Y a fe que lo conseguí, gracias a la sabia combinación de las sombras uno y tres de la paleta Amazonia del Mercadona, que cuesta solamente ¡seis euros y medio!