El fin de semana pasado estuve con varias amigas en una casa rural aragonesa: Villa Stata, en Estada. Y a lo mejor os ronda ahora mismo, mientas leéis estas líneas, la misma duda existencial que me embargó a mí: ¿de dónde viene un nombre tan pomposo para una casita rodeada de gatos, espectaculares puestas de sol y cantos de gallo al amanecer?
Todo concuerda cuando entras al baño y en vez de la típica bañera, más o menos profunda o apetecible, te encuentras con una reproducción de terma romana. Mis amigas, nada más poner los ojos en ella, me miraron a mí y dijeron: "toda tuya, Rocío, disfruta". Había hasta velas para encender.
Y, sumergida en tan mágicas aguas, os vengo a dar una gran noticia:
¡Me marcho a Roma durante dos meses, de estancia de investigación! Una realidad sobre la que hay que reflexionar rodeada de mucha espuma...
1. ¿Por qué me voy? A lo mejor alguien me lapida, pero lo hago solamente por exigencias laborales. Mi curriculum vitae lo exige, es algo que falta en él. Ya soy Profesor Contratado Doctor y tengo un sexenio de investigación, y ambas cosas las he logrado a base de docencia, publicaciones y congresos (y ayuda divina y humana, mucha); pero para el siguiente paso (el de Titular, allá en lontananza aún) necesito acreditar seis meses en universidades extranjeras.
2. ¿Quiere eso decir que me voy de mala gana? Ni mucho menos, pero soy tan pegada al terruño que es una decisión que me ha costado mucho, muchísimo. Y cuando al fin la tomé, para motivarme me dije ¿cuál es la ciudad que más me apetece para vivir un par de meses? Pensé en París y Roma, pero al final me decanté por esta última, ya que conseguí una invitación de La Sapienza...
3. Me voy a principio con mi madre, ya que participaremos juntas en un mismo congreso. Luego vienen mis tíos y luego una amiga de Sevilla. He encontrado un apartamento precioso y céntrico. Y estoy ilusionada, emocionada, feliz.
4. Como podéis imaginar, se avecinan reseñas emocionantes y diferentes en este espacio. Os vaticino imágenes de ensueño en Instagram (no por la calidad de la fotógrafa, sino por la categoría de lo retratado), que luego desgranaré aquí acompañadas de texto más o menos poético, ya sabéis, poética cosmética es o era lo mío...
5. ¿Y vlogs, Adaldrida? ¿Qué te ocurre últimamente con YouTube?
Me habéis pillado, vuelvo a atravesar una profunda crisis youtuber. No caeré en la trampa de decir de nuevo que lo dejo ("para volver a volver", me cantarían los chicos de Siempre así), pero voy a lanzar al mundo vídeos con cuenta gotas porque abomino de la mala calidad de imagen y sonido que últimamente me aqueja.
Pero roma bien vale un vídeo de YouTube, porque el contenido interesante ya está garantizado. Y se me ha abierto un mundo con los Stories de Instagram, que me salen nítidos y con buen sonido (debe ser por la posición y cercanía). Y aunque efímeros, se pueden guardar y editar, eso sí, con un recorte algo extraño y con brevedad en los fotogramas.
Así que sí, habrá vídeos de Roma..., de vez en cuando y en formato Instagram.
llenando las termas... solo se vive una vez XD |
Todo concuerda cuando entras al baño y en vez de la típica bañera, más o menos profunda o apetecible, te encuentras con una reproducción de terma romana. Mis amigas, nada más poner los ojos en ella, me miraron a mí y dijeron: "toda tuya, Rocío, disfruta". Había hasta velas para encender.
Y, sumergida en tan mágicas aguas, os vengo a dar una gran noticia:
¡Me marcho a Roma durante dos meses, de estancia de investigación! Una realidad sobre la que hay que reflexionar rodeada de mucha espuma...
2. ¿Quiere eso decir que me voy de mala gana? Ni mucho menos, pero soy tan pegada al terruño que es una decisión que me ha costado mucho, muchísimo. Y cuando al fin la tomé, para motivarme me dije ¿cuál es la ciudad que más me apetece para vivir un par de meses? Pensé en París y Roma, pero al final me decanté por esta última, ya que conseguí una invitación de La Sapienza...
3. Me voy a principio con mi madre, ya que participaremos juntas en un mismo congreso. Luego vienen mis tíos y luego una amiga de Sevilla. He encontrado un apartamento precioso y céntrico. Y estoy ilusionada, emocionada, feliz.
5. ¿Y vlogs, Adaldrida? ¿Qué te ocurre últimamente con YouTube?
Me habéis pillado, vuelvo a atravesar una profunda crisis youtuber. No caeré en la trampa de decir de nuevo que lo dejo ("para volver a volver", me cantarían los chicos de Siempre así), pero voy a lanzar al mundo vídeos con cuenta gotas porque abomino de la mala calidad de imagen y sonido que últimamente me aqueja.
Pero roma bien vale un vídeo de YouTube, porque el contenido interesante ya está garantizado. Y se me ha abierto un mundo con los Stories de Instagram, que me salen nítidos y con buen sonido (debe ser por la posición y cercanía). Y aunque efímeros, se pueden guardar y editar, eso sí, con un recorte algo extraño y con brevedad en los fotogramas.
Así que sí, habrá vídeos de Roma..., de vez en cuando y en formato Instagram.