La nueva edición limitada que presenta la firma española Belle, comercializada en los supermercados Eroski, nos transporta a un paraíso repleto de primavera.
Sin duda, lo que más me ha cautivado de la colección es el bronzer iluminador: unos polvos de sol aptos para piel clara y surcados por una pátina de burbujas de oro. Esta hobbit pija está ya un poco cansada de los bronceadores mates que buscan una ilusión de realidad: mi realidad no es morena nunca, y en el polvo de sol yo suelo buscar más bien un rubor de verano que realce mis mejillas.
Éste es un producto salvavidas y como tal lo he dejado en el cajón de mi mesa en la universidad, para iluminar mis largas jornadas de trabajo. Sublima la piel en momentos de cansancio, te hace brillar pero con moderación. Las partículas de glitter son tan finas que se funden en el rostro sin resultar groseras, a veces sin siquiera percibirse.
El otro producto fetiche de la colección es un labial en formato lápiz cremoso, lo que se ha dado en llamar con una palabra inglesa, ”chubby”. Dice poseer en su fórmula manteca de karité y se nota: hidrata mucho los labios pero a la vez los tiñe, por lo que resulta muy, muy, duradero. En esta edición se declina en dos tonos, Divine y Aurora. En el envase no deja claro el número ni el nombre, pero supongo que mi color es el 1 Divine ya que el esmalte de uñas que me enviaron es el 1 Morning rose, que por cierto es un nombre muy del mes de mayo y de la Virgen María.
Del resto de productos que tuvieron la bondad de enviarme he comenzado a hablar ya: la laca de uñas es rosa fucsia afrutada y la estoy probando aún. La máscara waterproof es magnífica, realmente aguanta en su lugar y no produce efecto ojera; es maravillosa como último paso o producto de acabado sobre la máscara Paradise de L’Oreal.
El delineador de ojos me ha resultado un engorro, y el único bluff de la colección. A ras de pestañas superiores se calca en el párpado, y en la línea de agua se emborrona y ensucia todo el look. Si tienes esa zona algo grasa o sueles lagrimear, ¡huye!
Así que prescindí de él en el maquillaje final. El look fue fotografiado en un día de muchísimo viento, como podéis ver en la imagen..., pero también podréis vislumbrar la fuerza de las mejillas iluminadas y del labial rosa fucsia, primaveral y muy femenino. No suele ser el color que yo elijo para sublimar mi boca, ni el que imagino para Eva, la primera mujer que pobló la tierra, pero me ha hecho salir de mi zona de confort de un modo muy dulce y favorecedor.