Mitad de noviembre, aquí una Hobbit pija aguantando las ganas de Navidad, diciéndose "aún no", obviando canciones como All I Want for Xmas de la amiga Mariah, o My Snowman de Sia que fue mi última obsesión...
Pero es entrar en Kiko, ver el mueble dorado y reluciente, escuchar a alguien como Nune enseñándome la colección Holiday Premiere..., y saber que todo ha comenzado. "Estoy dentro, ya no puedo salir", y menos cuando Blackfriday llama a mi puerta.
Por favor, no dejéis de leer mis lectoras cansadas de tanto boom negro: en este año no voy a hacer más blackfriday que el de Kiko.
Y es que la "promo" de "compras tres y te llevas otros tres gratis" sirve para homenajearte sin descontrolarte y para empezar a ejercer de paje de los Reyes Magos...
Sin embargo, como se ha puesto de moda hacer anti haul y explicar qué no vas a comprar en estos momentos de alocadas ofertas, aquí va lo que yo no pienso adquirir.
Pues antes de que lo diga nadie, aviso yo: no porque una gran amiga sea encargada de una tienda Kiko soy ciega, y esta colección es bastante cara... Por eso es bueno comprarla en esta semana.
No me parece que los coloretes valgan la pena, y no picaré con ellos.
Los regulares, que son dos, ya cuestan sus buenos veinte euros y me parecen bastante normalitos, tiran al rojizo y no tienen destellos, no me tientan y en cambio tengo mucho colorete de lujo en mi lista de deseos.
Pero lo que directamente me enfada es que han sacado otros dos coloretes "maxi" en polvera de cartón y que cuestan ¡treinta euros unidad!
Me parece un descaro impresionante y un nivel Nars que no poseen según he podido ver.
Cosas que valen la pena y mucho: las barras de labios, a las que dedicaré un post en exclusiva, y los cuartetos de sombras de ojos.
También cuestan veinte euros así que hay que saber elegir: hay uno con un tono azul y un lila muy bonitos, pero para mi gusto el mejor es el llamado Four Act Colour...
Una esplendorosa sinfonía de dorados: latón, oro viejo, ámbar, cobrizo..., los cuatro sedosos, cremosos y altamente pigmentados. Los cuatro duran una jornada entera, que los acabo de probar en mis párpados...
Sólo una última cosa digo: si tenéis, o tenéis intención de comprar el cuarteto de glitter Glorious Lights de Nabla para esta Nochevieja, necesitás estas cuatro sombras de Kiko para hacerles el juego completo.
En esta imagen veis lo que va a ser mi look de ojos de las fiestas que se avecinan...
Y aquí, un pequeño anticipo..., y sí, eso que veis brillar en mis mejillas es la sombra en tono cobre del cuarteto: quien dice sombras de ojos dice coloretes luminosos, ¿no creéis?
Ya comenté que la paleta era cremosísima, hasta el punto de poder deslizarse en pómulos, ¡es un producto polivalente!
En ambas fotos llevo también los "pintalabios" de la colección, que tendrán reseña en exclusiva pero adelanto son un puro sueño por quince euros unidad, están a nivel de L'Oréal y para mí son aún mejores por su brillo metálico y su duración...
Y, además de los productos que compré para regalar, adquirí para mí una de sus sombras individuales, llamada Blue soloist, que pondré a prueba más pronto que tarde...
¡Quedan inauguradas las entradas navideñas en este blog!